...“el ruso”, llama primero al jefe y dice que se hace cargo, que el toma la responsabilidad si pasa algo. Me quedo tranquilo, aunque no tanto. Me pego una ducha y una vez relajado pregunto donde puedo comprar algo para comer. El ruso con absoluto autoritarismo me dice: vos comes con nosotros; viendo el matambre al horno no hice más que obedecer.
El ruso esta triste, anda llamando mucha gente y contando lo que paso. Ayer un amigo se disparo en la cabeza. Sin embargo no puede ocultar su elocuencia. Es una bestia en todo sentido, un toro mecánico. Mas de 2 metros, enorme y con un empuje y una cara que mete miedo. Todo eso transportado por una parla interminable que acapara toda la conversación. El ruso es como Roberto de Artois

No hay comentarios:

Publicar un comentario